La compañía desarrolladora Starbreeze Studios se encuentra en serios problemas financieros, declarándose oficialmente en estado de emergencia.
Starbreeze presentó su balance del primer trimestre de 2019, develando el terrible estado de la compañía tras la reconstrucción forzosa que han tenido que emprender.
A finales de 2018, Bo Andersson renunciaría a su posición de CEO de la compañía tras las bajas ventas del título Overkill’s The Walking Dead.
La compañía sueca había invertido una gran cantidad de esfuerzo, dinero y recursos para hacer de este juego el éxito más grande de la compañía.
Lamentablemente para ellos, Overkill’s The Walking Dead fue un gigantesco fracaso de ventas, golpeando fuertemente las finanzas de Stabreeze.
Reconstrucción
El fracaso de este estreno llevó a Strabreeze Studios a emprender una reestructuración de sus planes de negocios para poder sobrevivir.
Han logrado recibir ingresos importantes gracias a las ventas de Payday 2 para Nintendo Switch, aunque lejos de sus expectativas oficiales.
Starbreeze logró acumular cerca de 5 millones de dólares en el primer trimestre de 2019, una cifra muy inferior a la inversión realizada por la compañía, perdiendo 11 millones en este período.
Para sobrevivir, el nuevo CEO de la compañía, Mikael Nermark, se encuentra buscando financistas para poder mantener la operatividad de la compañía para el próximo año.
Segun Nermark, Starbreeze «carece de los fondos suficientes para operar los próximos 12 meses de manera estable, y existe la posibilidad de liquidar los activos de la compañía a mitad de 2019 si no se consiguen fondos».
Payday 3, el último barco
La última oportunidad a la que se aferra Starbreeze Studios es a la de terminar de desarrollar y lanzar Payday 3, que se encuentra en desarrollo desde 2018.
Mikael Nermark confía que Payday es la franquicia más importante de la compañía y buscará construir el futuro de Starbreeze sobre el éxito de los juegos de esta saga.
Gracias a Payday 2 para Nintendo Switch fue que Starbreeze ha podido seguir en terapia intensiva y no haber desaparecido ya, tras el fracaso de Overkill’s The Walking Dead.