Porque Konami no podía dejar de entorpecer sus franquicias, han creado una nueva versión de Silent Hill que hace a sus fans rabiar.
Una nueva máquina tragamonedas de Silent Hill se une al catálogo de franquicias de videojuegos que la compañía japonesa ha transformado en juegos de casino y recreación.
Apuntando a su presentación de productos en Las Vegas, Konami afirma que esta maquina tendrá una presentación muy agradable y particular, diseñada para el confort y comodidad del jugador.
Por supuesto, los fans de los videojuegos estarán de acuerdo en que «confort y comodidad» son los elementos que caracterizan a Silent Hill.
Konami a lo suyo
Una de las características más peculiares de la industria de videojuegos es la naturaleza de ciertas compañías de tratar a sus propiedades más valiosas e icónicas.
Casas como EA o Rockstar Games estarían salivando de tener entre sus propiedades a franquicias tan arraigadas en la industria como las que tiene Konami. Basta decir algunos nombres como Metal Gear, Castlevania, Silent Hill o Bomberman por citar algunas.
Pero Konami tomó la decisión de cambiar el rumbo en su operatividad a partir de que redistribuyeron el formato de su compañía y le quitaron a los productores de videojuegos poder de decisión.
Konami no era exactamente un paraíso terrenal antes de este cambio, pero al menos eran una compañía de videojuegos, mientras que, tras el cambio de dirección y el muy público divorcio entre la compañía y Hideo Kojima, se convirtieron en una casa de Pachinko.
Con el uso de Castlevania, Metal Gear y ahora Silent Hill como elementos decorativos de sus máquinas tragamonedas, Konami sigue insistiendo que su prioridad es el dinero que producen para el mercado local con estos sistemas.
Esto representa una prueba más del abandono de Konami hacia la industria de los juegos, enfocándose en hacer versiones anuales de Pro Evolution Soccer y nada más. Una verdadera pena.