Los problemas de la industria del anime en una situación tan grave como la pandemia que aqueja al mundo, puede sonar como un tema trivial frente a las pérdidas que a diario prevalecen en las noticias.
Sin embargo, para aquellos que viven su día a día del dinero que esta genera, como productoras, directores, guionistas e incluso el artista de las obras originales, el qué ocurrirá con la industria es un problema que les afecta directamente y a las personas que dependen de sus ingresos.
Para una mayor comprensión de la escala que ha tomado en las últimas semanas en Japón el virus y como se ha visto en problemas la industria del anime, te contaremos que ha estado ocurriendo desde que inició la contingencia con una de tus formas de entretenimiento favoritas, el anime.
¿Qué ocurre actualmente en Japón?
Para poder analizar que ocurre en la industria debemos tener clara cuál es la situación al día de hoy, 16 de abril, donde el país Nipón ha declarado el estado de emergencia a nivel nacional.
Con ello, gobernadores de todas las prefecturas podrán implementar medidas para cerrar, suspender o cancelar eventos e incluso sectores de las empresas privadas, como locales nocturnos, de comida, cine y lo que más temen los fans, productoras y editoriales podrían cerrar sus puertas hasta mínimo el 6 de mayo.
Actualmente ambas ramas iniciaron un proceso de trabajo desde casa a principios del mes de abril, cuando llegó el virus a la capital y se extendió con mucha más rapidez que en el interior, donde había sido controlado con bastante eficacia.
Es por ello que los retrasos actuales, sobre todo en mangas, se deben a este proceso de ajuste, donde la cadena de producción, edición y publicación se ha visto afectada por el distanciamiento social voluntario de sus trabajadores.
En el mundo de la animación las restricciones varían de estudio en estudio, mientras algunos tenían una fuerza laboral que ya ejercía desde casa, otros, como aquellos que se especializan en el CG, no pueden cerrar sus puertas, ya que el costoso equipo que permite realizar los efectos solo está en las oficinas.
El impacto de China en los estudios
Aunque el cierre de las oficinas y las posibilidades de contagio entre empleados es un riesgo actual, para febrero de 2020 varios animes como ‘Toaru Kagaku no Railgun T‘ y ‘Plunderer’ sufrieron pausas inesperadas que a vista de muchos fueron injustificadas.
Con el virus lejos de llegar a la capital y las demás series siendo transmitidas sin contratiempos, el problema para los estudios encargados, J.C.Staff y Geek Toys, es que muchas de las transiciones y procesos de coloreado son realizados por filiales en China.
Estas prácticas son muy comunes en la industria, empresas como Toei Animation poseen empresas afiliadas en Shanghai y otras como Studio Deen tienen en su nómina la conocida, Suzhou Tani Movie Co.
Al estar el COVID-19 en un momento crítico en el país que se originó, las filiales cerraron y sin ellas fue imposible finalizar los capítulos, que fueron posteriormente pautados para abril o incluso julio de 2020.
Auge del virus en Tokio
Con el incremento exponencial del coronavirus en Tokio, las productoras se están enfrentando a miedos más cercanos a casa y la primera de ellas fue Twin Engine, responsable de animes como ‘Babylon’, ‘Pet’ y ‘Pokémon Twilight Wings‘.
Luego de que uno de sus empleados entrara en contacto con un caso confirmado, todas las productoras bajo su supervisión, Geno Studio, Revoroot y Studio Colorido, pasaron a trabajar desde casa de forma inmediata.
Un fenómeno interesante es cómo se diferencian las productoras y editoriales en estos casos, si bien la noticia de un estudio cerrado implica retrasos, para editoriales como Shueisha, hogar de la revista más popular del shonen, un caso significa la posibilidad de contagiar a un autor.
Cada semana los mangakas se reúnen con sus editores para discutir la historia del capítulo y mejoras a realizar, estas personas más adelante retiran los manuscritos que llevarán a la empresa y eventualmente a la imprenta.
Un solo editor enfermo es una reacción en cadena que promete un gran riesgo para toda la producción y, a ojos del público, sería responsabilizado si un gran autor como Eiichiro Oda, o Koyoharu Gotoge padecieran más adelante la enfermedad, arruinando la reputación del empleado y el prestigio de la empresa.
¿Qué ocurre con los autores?
Aunque los estudios e imprentas se han sometido a pausas, el primer eslabón de la cadena del anime no se ha detenido desde el inicio de la pandemia, los mangakas, quienes se encargan cada semana o mes de tener un capítulo listo para sus compañías.
Conocidos por ser la fuerza laboral que solo puede ser detenida tras graves problemas de salud, ellos continúan sin parar, pero incluso para personas que no abandonan su casa como estilo de vida, han sentido la presión de la situación.
El mismo Oda llegó a expresarse sobre la situación actual con una breve frase a través de sus redes sociales:
“Es difícil escribir sobre cualquier cosa con el mundo de esta forma”.
Si al hombre que ha dibujado sin descanso por más de 20 años ‘One Piece’ no logra escaparse en su obra en estos momentos, es fácil imaginar cómo se encontrarán autores más pequeños que viven de su publicación semanal.
El futuro cercano del anime
Los próximos 5 meses definirán el futuro de la industria del anime, un momento decisivo donde se separará a aquellas productoras que pueden trabajar desde casa y aquellas que no.
De extenderse el periodo, muchas empresas podrían cerrar de forma definitiva y las franquicias que se sostienen gracias a las tiendas de mercancía o cafés temáticos, asumirán un duro golpe, ya que de estas prácticas es de dnde proviene el grueso del capital de las compañías.
Entre películas que no poseen fecha de estreno, series que están retirando su programación del calendario de temporada y una industria que está descifrando cómo manejar todas las áreas de forma remota, lo único seguro es que los cambios llegarán y más pronto de lo que pensamos.
Ante una pandemia, solo queda esperar a que baje la marea y aunque algo como el anime no es de primera necesidad, no debes olvidar que detrás de nuestra forma favorita de ocio hay familias que dependen de ella.
¿Qué opinas sobre la influencia de la pandemia en la industria del anime? Cuéntanos en los comentarios y no olvides estar atento a más noticias sobre el mundo del anime aquí en PlayerOne.