La actriz sueca concedió una entrevista para Good Morning America en donde habló de los proyectos que tiene en mente para el futuro próximo y no dejó de mencionar que ya tiene ganas de volver a interpretar al icono gamer, Lara Croft.
Vikander ya hizo de la protagonista de Tomb Raider (2018) con la primera película de la saga desde que la última que filmó Angelina Jolie en 2003. El presupuesto de esa nueva versión fue de 94 millones de dólares y al cabo de unos meses la película logró generar 274 millones en taquilla, lo que no es demasiado para los estándares hollywodenses pero bastante bien para lo que son las películas de videojuegos.
Retraso sin anuncio
Para septiembre del 2019 se anunció que habría secuela pero no se comunicó una fecha de estreno, ahora nos enteramos gracias a Vikander que de hecho la película iba a filmarse a lo largo del 2020 por lo que es posible que fuera a estrenar para fin de año o los primeros meses del 2021. Ahora, debido a la pandemia los planes han cambiado.
«El plan era que empezáramos a rodar este año, por supuesto debido a la situación [de la pandemia], que ahora es muy diferente. Todavía estamos en conversaciones al respecto, así que espero que podamos llegar a él el próximo año».
La película sigue a cargo de Ben Wheatley que tomó el testigo de Roar Uthaug, pero por ahora sabemos que Wheatley primero estará trabajando en Rebecca que se estrenará en Netflix y se encuentra en postproducción, además de una película aún sin nombre que supuestamente filmó durante el confinamiento.
Así que parece que la película se ha visto retrasada sin realmente haber anuncios al respecto, la pandemia ha hecho estragos por lo que los que esperaban la secuelan deberán esperar un poco más para ver a Vikander continuar su saga personal.