Shadowlands se estrenó hace un par de semanas y, como viene siendo costumbre, hubo varios elementos positivos y otros no tanto. La expansión de WoW fue por unos pocos días el mayor lanzamiento en PCs de los últimos años, pero Cyberpunk 2077 le arrebató el título poco después. Y casualmente, ambos juegos aún necesitan varios ajustes.
El caso de WoW es distinto, no tiene versiones en consola pero su contenido endgame ha sido criticado por los jugadores por ser demasiado largo y tener fallas en el diseño. Este contenido gira principalmente alrededor de Torghast, la Torre de los condenados.
La mazmorra final
Este lugar es el hogar del jefe final de la expansión (spoilers), el carcelero es el gran obstáculo al final y justamente su pelea y lo que le precede representan un problema actualmente en el MMO más conocido de la industria.
Las críticas principales es el modo de dificultad tan irregular, enemigos con demasiada vida, jugadores frustrados por un jefe final imposible de vencer bajo ciertas condiciones y una mazmorra (todo Torghast) que puede tomar una hora en completarse.
El director del juego, Ion Hazzikostas, comentó:
«Esta es una prioridad para nosotros en este momento, y tenemos un montón de cambios en proceso, todos los cuales están destinados a facilitar la experiencia de Torghast. Los jugadores verán esos cambios en los próximos días».
Los cambios más recientes cambiaron la estructura del lugar, pasó de tener tres largas capas a ocho, cada una con indicaciones sutiles de si la siguiente capa es demasiado para el jugador o no. Además, también se ha ajustado el número de enemigos para que los jugadores de cualquier clase puedan superar la mazmorra y no solo los tanques y sanadores.
El futuro de Torghast
Por su parte, Hazzikostas, que concedió una entrevista a Polygon aclaró que ahora el equipo tiene cuatro metas para el futuro cercano. La primera es acortar el tiempo que toma completar la mazmorra, la segunda es incrementar el porcentaje de jugador y clases que puedan lograrlo. Blizzard espera resolver estos asuntos antes del año nuevo.
Por otro lado, la meta número tres: asegurarse de que los jugadores tengan una gran diversidad de poderes en la mazmorra y la cuarta: dejar claro el nivel de dificultad de cada capa pueden tomar un par de meses debido a lo complicado que es diseñar una mazmorra para todos.
Así que parece que la expansión necesitará un tiempo antes de ser lo que los desarrolladores y jugadores quieran.
«Estamos trabajando activamente para mejorar las cosas”, aporta Hazzikostas. «Y no nos detendremos hasta que la gente se divierta y se sienta como, ya sabes, una fuente de historias sobre lo genial y dominado que eres», concluyó.